La cooperación tiene como objetivo poner en servicio el avanzado avión de combate para 2035 combinando el Tempest, de liderazgo británico, con el programa japonés F-X. El nuevo proyecto será bautizado Global Combat Air Programme.
Los tres países todavía trabajarán en detalles sobre el respectivo plan, su ubicación y cómo será distribuido. El Reino Unido precisó que la nueva aeronave, destinada a reemplazar los cazas Typhoon y complementar su flotilla de F-35 Lightning, será compatible con los cazas de la OTAN.
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