
“Hay dos grandes transformaciones en curso”, afirmó Lula, antes de precisar que ninguna de ellas pueden ser modelada “por un puñado de economías ricas”. La primera es “la revolución digital” y la segunda “la transición energética”, detalló el mandatario. “Nuestros países deben estar en condiciones de responder a estos cambios”, aseveró.
“Debemos forjar una visión común que tenga en cuenta las preocupaciones de los países de renta baja y media y de otros grupos más vulnerables. Es estratégico que el G77 haya dedicado, por primera vez, una cumbre al tema de la ciencia, la tecnología y la innovación”, destacó.