
De acuerdo con la Cancillería rusa, los ministros de exteriores de ambos países “hicieron hincapié en la necesidad de un alto el fuego en la zona del conflicto palestino-israelí y la rápida desescalada de la situación en la región”.
“Tanto Moscú como Ammán instan a todas las partes implicadas a actuar con moderación para evitar consecuencias catastróficas para todo Oriente Medio”, añadió.