Nosotros, que vivimos en una Isla, sabemos la importancia de estar conectados con el resto del país para garantizar el movimiento interno y la llegada de turistas.
Por eso, desde que asumió el nuevo gobierno, los cambios improvisados, sin mucha explicación de las reglas del juego en Aerolíneas Argentinas, comienzan a generar incertidumbre y preocupación en todos los fueguinos y en quienes invierten, se esfuerzan y trabajan en la actividad turística.
El posible recorte de vuelos hacia y desde Rio Grande, la modificación de frecuencias a Ushuaia para los próximos meses hasta el posible recargo del 30% del impuesto PAIS en pasajes al extranjero no hacen más que generar preocupación e incertidumbre.
Uno de los mayores desafíos de la actividad turística es quebrar la estacionalidad, esa misma que con gran esfuerzo, venimos poco a poco superando, pero al ser aerodependientes la decisión del Gobierno Nacional de cancelar tramos de Aerolíneas Argentinas durante los meses de abril, mayo y junio hacia la provincia afectará sin lugar a dudas a agencias de viajes, hoteles, gastronomía y todos los servicios vinculados a la actividad.
Si no hay vuelos, no hay turistas que puedan consumir, y, en consecuencia, no hay movimiento en la economía local, es decir, va a haber menos trabajo para los fueguinos.
No cabe sólo hablar de lo perjudicial de esta medida para el turismo, sino también para los propios fueguinos, sociedad que ha ido en aumento durante los últimos años, y que durante estos meses aprovecha para viajar, generando una demanda interna local de estos vuelos.
De 100.000 habitantes por ejemplo, con que sólo la mitad tome una solo vuelo por año, da un promedio 137 habitantes por día, lo que equivale a 1,4 de un avión Embraer por día o el 75% de ocupación de un avión 737-NG.
Pero esta medida, todavía no está clara ya que nadie puede explicar cómo serán los vuelos en la temporada baja y no nos sorprende porque desde hace poco más de un mes que las reglas de juego en Argentina no son claras.
La pregunta es: si antes había vuelos con una demanda y ocupación de hasta el 95%, ¿por qué ahora los quitan? Se argumenta que la posible suspensión de vuelos responde a la necesidad de refaccionar la flota y de reestructurar la empresa.
Es totalmente falso. En los últimos años no solo se redujo el déficit de la empresa en sus balances tanto en pesos como en dólares, sino que se aumentaron las frecuencias, se modernizaron las aeronaves, se mejoró el mantenimiento, la conectividad federal y hasta la puntualidad.
Claramente seguimos con el relato. Ese relato de trabajar para la “reactivación productiva” de la Argentina, cuando lo único que hace este gobierno con la suspensión de los vuelos a nuestra provincia es perjudicar a uno de los sectores más productivos y que más divisas ingresa, en nuestra provincia y en el país como lo es el turismo.
Sin vuelos, no hay turistas. Sin turistas, la economía local no se mueve. Si la economía local no se mueve, no hay trabajo. Sin trabajo, no hay reactivación productiva.
Gran equivocación por parte del gobierno eliminar los vuelos, espero que puedan recapacitar en su decisión, por el bien de todos, pero especialmente por los fueguino.